Solo de flauta (Nicolás Guillén - Pablo Milanés)
La flauta gemía
su melancolía.
La flauta decía:
no hay pena tan grande cual la pena mía.
La flauta gemía
su melancolía.
La flauta decía:
si lloro, mi llanto parece el estruendo de loca alegría...
La flauta gemía
su melancolía.
La flauta decía:
si canto, mi canto parece suspiro de cruel agonía...
La flauta gemía
su melancolía.
La flauta decía:
no hay pena tan grande cual la pena mía.
Yo soy cual la flauta que ritma con ritmo sonoro
su fino y sonoro quebranto:
si canto parece que lloro;
si lloro, parece que canto...
Estos son textos inéditos propios y otros ajenos conocidos, también hay algunas imágenes y señales que he hallado y construido; y que ahora deseo compartir entre-nos-otros (me gusta recibir tus comentarios). Es parte del ejercicio de exponer-me como la aprendiz que soy, de poder viajar entre los pliegues de mis trazos, navegando preguntas para seguir abierta a reinventarme, evolucionar-me, desatarme, alborotarme, quitarme el polvo, y más aún, desaprender atajos a la sombra.